Por La Vía Campesina
La Vía Campesina, el movimiento campesino internacional, acoge el reciente anuncio de un acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás sobre Gaza. Este acuerdo de alto el fuego, que debería haberse alcanzado hace mucho tiempo, supondrá un alivio y un respiro muy necesarios para millones de palestinxs que llevan más de 467 días soportando una guerra genocida por parte de las fuerzas de ocupación israelíes. Este acuerdo de alto el fuego de 42 días no pone fin a la tragedia sufrida por lxs palestinxs ni borra la devastación experimentada desde octubre de 2023.
Pedimos un alto el fuego permanente, paz y justicia. Esto debe incluir a Cisjordania, que ha visto un fuerte aumento de la escalada de ataques y acaparamiento de tierras por parte de los colonos israelíes.
Un alto el fuego por sí solo no es justicia. La verdadera justicia implica la liberación completa de lxs palestinxs y los territorios de la ocupación israelí, el desmantelamiento de los asentamientos y la devolución de las tierras robadas a sus legítimxs propietarixs, así como el restablecimiento de la plena soberanía y el establecimiento de la autodeterminación de lxs palestinxs para construir su futuro. Justicia significa que lxs palestinxs puedan vivir con dignidad en Palestina, libres de bombardeos, desplazamientos y asedios, y que los autores de crímenes de guerra sean llevados ante la justicia.
Durante 15 meses, la población de Gaza se ha enfrentado a una implacable maquinaria bélica que ha matado y herido a cientos de miles de personas, entre ellas más de 10.000 niñxs. El Estado de apartheid israelí no se limitó a masacrar a la población de Gaza, sino que también destruyó deliberadamente todo lo que representa y sostiene la vida en la franja de Gaza. Más de dos millones de palestinxs padecen hambre debido al uso de tácticas de inanición por parte de la ocupación. Infraestructuras sociales y físicas críticas como hospitales, escuelas, sistemas de abastecimiento de agua, redes eléctricas y fuentes de energía han sido borradas hasta los cimientos en un intento de hacer imposible la vida de lxs palestinxs y expulsar a la población de la tierra. Tampoco se libró el sector agrícola y pesquero.
A pesar de esta devastación sin precedentes, lxs palestinxs han demostrado una vez más que la voluntad de vivir es más fuerte que cualquier máquina de guerra. La resistencia del pueblo palestino es una profunda expresión de la creencia en la justicia y del compromiso inquebrantable con la vida, la dignidad y la libertad.
Pedimos que se mantenga la solidaridad con el pueblo palestino hasta que se logre un alto el fuego duradero y permanente y prevalezca la paz como obligación moral y humanitaria permanente. Los autores de crímenes de guerra y genocidio deben rendir cuentas por los atroces crímenes y el uso sin precedentes del hambre como arma de guerra contra la población civil de Gaza. Debe imponerse un embargo de armas integral para detener el flujo de armas. Y debe apoyarse la reconstrucción de Palestina de acuerdo con una visión palestina, no dictada por la ocupación. Pedimos a los gobiernos de todo el mundo que apoyen los esfuerzos de reconstrucción y a las agencias de la ONU, en particular la FAO y el FIDA, que apoyen la reconstrucción de los sectores agrícola y pesquero en Gaza.
Nos solidarizamos con el pueblo de Palestina mientras comienza el trabajo de reconstrucción y rehabilitación de la tierra. La Vía Campesina permanece unida y continúa luchando por la libertad duradera y el respeto de Palestina y su pueblo.
¡Palestina libre!
En solidaridad,
La Vía Campesina
Globalicemos la lucha, globalicemos la esperanza